El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, dijo en comparecencia ante senadores que hasta 30 mil personas podrían fallecer en México a causa de la pandemia de COVID-19.
«El 27 de febrero, por cierto, di una conferencia de prensa, antes que empezaran las vespertinas en Palacio (Nacional), la dimos aquí, en la Secretaría de Salud, y precisamente fue uno de nuestros primeros anuncios de estimaciones donde hablamos de 12 mil 500 personas que podrían perder la vida con un intervalo tan de amplio, como justamente el límite de seis mil y podría llegar hasta cerca de 25 mil o 30 mil».
«Esperamos que no ocurran tantas defunciones pero, como ya señaló el senador Navarro, es muy impresionante el efecto que tienen las enfermedades crónicas sobre la mortalidad», agregó al comparecer ante los miembros de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).
En tanto, el presidente de la Jucopo, el morenista Ricardo Monreal Ávila, cuestionó al funcionario sobre por qué se ha mantenido el modelo de vigilancia epidemiológica, llamado Centinela, y no se han aplicado pruebas de forma generalizada.
A esto, López-Gatell respondió que en México ni en otro país se tiene un registro de todos los casos, y que el gobierno federal siempre ha afirmado que el número de casos que da a conocer todos los días es un subconjunto de los existentes.
«Y eso jamás debe interpretarse como un fenómeno de deliberada negligencias o incapacidad. Y hago la comparación porque en la narrativa pública en México se ha privilegiado la percepción o en algunos segmentos de nuestra sociedad de que solo México no tiene una identificación completa de casos. Falso. Y esto es demostrable», comentó.
“La diferencia estriba en que el gobierno mexicano quizá a diferencia de muchos otros, acaso la mayoría, declaradamente ha dicho que no tiene como propósito en la vigilancia epidemiológica el contar cada uno de los casos, sino, por el contrario, acudir a los mecanismos eficientes, moderados y probados de la vigilancia focalizada es el conjunto metodológico al que pertenece la vigilancia centinela de enfermedades respiratorias”.
Sobre la no aplicación de pruebas generalizadas, López-Gatell comentó que la afirmación del titular de la Organización Mundial de Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, de que deben realizarse “pruebas, pruebas, pruebas” se ha prestado a una enorme confusión en la narrativa pública, el interpretar que se deben hacer pruebas generalizadas, es decir, tratando de alcanzar el cien por ciento de la población independientemente de sus características clínicas.