El adulterio siempre se ha visto de diversas maneras, en algunas ocasiones de buenas y otras no tanto, esto depende según los valores morales de cada persona y con el paso de las generaciones.
En Hong Kong existe una ley que permite a las mujeres asesinar a sus maridos, usando nada más y nada menos que sus propias manos y no solo eso, sino que también pueden tomar posesión de la mitad de pertenencias que obtenga la amante del individuo de moral distraída. Interesante, ¿no?