Esta situación ocurre a pesar de que el municipio cuenta con tres panteones activos, uno clausurado, dos privados y 95 ejidales
Ante el incremento de casos de COVID-19, el Gobierno del estado de Guerrero creó 300 fosas comunes en la ciudad costera de Acapulco, porque los panteones y crematorios están al límite de su capacidad.
El Ayuntamiento de Acapulco comenzó la excavación en uno de los panteones municipales para las inhumaciones por COVID-19, informó la Alcaldesa Adela Román.
“De los dos centros de incineración que tenemos en el puerto, uno de ellos está llegando a saturarse y ya no se da abasto con los cadáveres que llegan, se abrieron por esa razón más fosas en el cementerio para dar cabida a los cuerpos que también van llegando en mayor cantidad cada día”, comentó.
Guerrero está en la posición número 18 de contagios de coronavirus a nivel nacional, con 1 mil 083 pacientes y 161 decesos reconocidas por el Gobierno estatal.
Sin embargo, por su escasa infraestructura, la entidad tiene una ocupación hospitalaria de 71 por ciento de camas generales, lo que la ubica solo por debajo del 72 por ciento de Ciudad de México, y por encima de la media nacional de 39 por ciento.
Además, la Alcaldesa detalló que, de 25 muertes diarias, al menos 10 son por el coronavirus.
El Gobierno del Estado confirmó la tendencia en la entidad.
“Durante los últimos días se han presentado 695 casos, lo que habla de un importante incremento”, declaró el Scretario de Salud de Guerrero, Carlos de la Peña.
El Director de Panteones y Velatorios de Acapulco, Gerardo Sánchez, aseguró que estas fosas son para personas de bajos recursos y en situación de calle, por lo que no hay costo.
Hasta el momento, precisó que nueve de las 70 fosas elaboradas ya están ocupadas.
“De acuerdo a las estadísticas, si sigue creciendo el número de personas que fallecen, pues va a haber un poquito de problemas, hasta el momento hemos estado al límite, sí al limite, y esperemos que se resuelva esta situación”, declaró Sánchez.